13/7/07

Lo típico: ¿CIENCIA O FICCIÓN?

FAHRENHEIT 451, RAY BRADBURY, 1953

[...] La realidad es que no anduvimos muy bien hasta que la fotografía se implantó. Después, las películas, a principios del siglo XX. Radio. Televisión. Las cosas empezaron a adquirir masa.

Montag permaneció en la cama, inmóvil.

- Y como tenían masa, se hicieron más sencillas – prosiguió diciendo Beatty – en cierta época, los libros atraían a la gente, aquí, allí, por doquier. Podían permitirse ser diferentes. El mundo era ancho. Pero luego, el mundo se llenó de ojos, de codos y de bocas. Población dobe, triple, cuádruple. Films y radios, revistas, libros, fueron adquiriendo un bajo nivel. Una especie de vulgar uniformidad. ¿Me sigue?

- Creo que sí.

Imagínalo. El hombre del siglo XIX con sus caballos, sus perros, sus coches, sus lentos desplazamientos. Luego, en el siglo XX, acelera la cámara. Los libros más breves, condensaciones. Resúmenes. Todo se reduce a la anécdota, al final brusco. [...]

[...] Los años de Universidad se acortan, la disciplina se relaja, la filosofía, la historia y el lenguaje se abandonan, el idioma y su pronunciación son gradualmente descuidados. Por último, casi completamente ignorados. La vida es inmediata, el empleo cuenta, el placer lo domina todo después del trabajo ¿por qué aprender algo excepto apretar botones, enchufar conmutadores, encajar tornillos y tuercas? [...]

[...] No es extraño que los libros dejaran de venderse, decían los críticos. Pero el público, que sabía lo que quería, permitió la supervivencia de los libros de historietas. Y de las revistas eróticas tridimensionales, claro está. Ahí tienes Montag. No era una imposición del gobierno. No hubo ningún dictado, ni declaración, ni censura, no. La tecnología, la explotación de las masas y la presión de las minorías produjo el fenómeno. A Dios gracias.

En la actualidad, gracias a ello, uno puede ser feliz continuamente, se le permite leer historietas ilustradas o periódicos profesionales. [...]

[...] No todo nacimos libres e iguales, como dice la Constitución, sino todos hechos iguales. Cada hombre, la imagen de cualquier otro. Entonces todos son felices porque no pueden establecerse diferencias ni comparaciones desfavorables. ¡Ea! Un libro es un arma cargada en la casa de al lado. Quémalo, quita el proyectil del arma, domina la mente del hombre. ¿quién sabe cual podría ser el objetivo del hombre que leyese mucho? ¿Yo? No lo resistirías ni un minuto. Y así cuando por ultimo las causas fueron totalmente inmunizadas contra el fuego, ene le mundo entero (la otra noche tenias razón en tu conjeturas) ya no hubo necesidad de bomberos para el antiguo trabajo. Se les dio una nueva misión como custodios de nuestra tranquilidad de espíritu, de nuestro pequeño comprensible y justo temor de ser inferiores. Censores oficiales, jueces y ejecutores. Eso eres tú Montag. Y eso soy yo. [...]

[...] Cuando era niño, mi abuelo murió. Era escultor. También era un hombre muy bueno, tenía mucho amor que dar al mundo, y ayudó a eliminar las miserias en nuestra ciudad; y construía juguetes para nosotros, y se dedicó a mil actividades durante su vida; siempre tenía las manos ocupadas. Y cuando murió, de pronto, me di cuenta de que no lloraba por él, sino por las cosas que hacía. Lloraba porque nunca más volvería a hacerlas, nunca más volvería a labrar otro pedazo de madera y no nos ayudaría a criar pichones en le patio, ni tocaría el violín como él sabía hacerlo, ni nos contaría chistes. Formaba parte de nosotros, y cuando murió, todas las actividades se interrumpieron, y nadie era capaz de hacerlas como él. [...] Configuró el mundo, hizo cosas en su beneficio. La noche en que falleció el mundo sufrió una perdida de 10 millones de buenas acciones. [...]

¿A qué viene esto? Unas aclaraciones.
-Esto es un fragmento de la novela Fahrenheit 451 publicada en 1953 por Ray Bradbury.
-UTOPÍA: Plan, proyecto, doctrina o sistema
optimista que aparece como irrealizable en el momento de su formulación. Un ejemplo de ello es la novela de William Morris, Noticias de ninguna parte.
-Lo contrario a utopía sería un plan, proyecto o sistema pesismista. Un ejemplo de ello es la novela Fahrenheit 451.
-¿Os suena de algo?
-Nuestro presente es una ¿Utopía, anti-utopía, realidad...? Vos deciden...